Ese viejo en concreto


En un banco cualquiera de un parque cualquiera está sentado un viejo en concreto. Muy viejo, no hay nadie como él. No hay otro viejo en otro banco de ningún parque fumándose un porro del tamaño de un habano, disfrutándolo con grandes caladas, sonoras, pacientes, inundando sus pulmones y mirando al cielo de cuando en cuando, como si no pudiera creerse la buenísima mierda que ha conseguido en otro banco cualquiera de un parque cualquiera.

Comentarios

Read this blog in your language!