La Plaga
Nadie sabe de dónde surgió La Plaga. Algunos medios empezaron a divulgar la idea de que habían llegado del espacio. Otros, como siempre, decían que eran un experimento de los gobiernos para reducir la población mundial.
¿Qué es La Plaga? Es difícil de explicar, a menos que lo hayas visto en directo. Las ventanas vibran con tonos graves, las paredes se tambalean como si se estuviera produciendo un terremoto, y el aire se vuelve denso, caluroso. Da igual que estés en un chalé con jardín o en un búnker bajo tierra, La Plaga entra de todas formas.
Es una especie de nube inmensa de insectos voladores que adoptan formas y se mueven como un ente único. Siempre tienen un objetivo, solo uno cada vez. Puede ser tu padre, tu hermano, o el vecino de al lado. Es una continua lotería que todos estamos obligados a jugar.
No se sabe si es fruto de una alucinación colectiva a causa del terror o de algún narcótico que expulsan esos condenados bichos. En el momento en que consiguen entrar allá donde estés, se convierten en bestias horribles, perros diabólicos que parecen sacados de algún videojuego. Agarran a su víctima y desaparecen por donde han venido en cuestión de segundos, da lo mismo las veces que les dispares por la espalda.
Con esta última, son dos veces en mi vida las que lo he presenciado. Mi hermano ya no los verá más. Nunca sabré qué cojones son esas cosas, no sé si son reales, porque nada real se comportaría de esa manera.
Pero lo que sí sé es que la tercera vez que los vea tendré atados al abdomen dos cartuchos de nitroglicerina con un detonador, y todo el tiempo del mundo disponible para ellos.
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